Mal Trabajo

No se cae de la ventana ni queda fijo en el lugar

No se mueve desde el cielo, no se asocia al bienestar

No se crea de la nada mas la nada lo creó

Y no es tan sólo un sueño, pero es más que ilusión

Se escode entre razones, pensamientos y sentir

Se escapa de los hombres, de la gente y de mí

No quiere y no puede evitar aparecer

Y es por todos observada, como imagen del ayer

A veces, sin pensarlo, vuelve a comenzar a hablar

Y los hombres que le oyen, se dejan impresionar

Lamentablemente sé que todo el mundo no le ve

Ni le siente, ni le escucha, ni le quiere conocer

Lentamente se agota, vuelve a en silencio estar

Sus palabras, que rebotan, parece le cansarán

Se siente y también sufre cuando no le quieren escuchar

Aunque grite, aunque luche, eso nada cambiará

Es la gente quien le omite, sabiéndolo muy bien

Pues no acepta que le diga lo que hay o no que hacer

Mal trabajo el de la consciencia dar consejos y demás

Porque es una pega ingrata y al humano le da igual. 

Círculo Vicioso

Lo más entretenido de la historia es recordar lo que pasó

Pues lo que ahora sucede hace tiempo se advirtió

Y todos quienes dicen que esto nunca sucedió

Olvidan que sus ideas gestaron lo de hoy

Buscan culpables en todos, sin mirar su propia culpa

Castigan a destajo sin pagar nunca su multa

Creen saberlo todo siempre, sin aceptar jamás error

Pobre intento de omnisciente que saber jamás logró

Se hacen víctimas y pobres, cuentan el cuento a su medida

Omiten, olvidan los pasajes, donde su firma va incluida

Y siguen ciegos en su orgullo embarrándola más y más

No saben que si no recogen, no podrán ya más sembrar

Llevan el mundo en sus hombros, intentándolo salvar

De un sartén que le hace daño, pero lo llevan a quemar

Siguen cortando ese cable que retrasa aquel reloj

De la bomba que amenaza matarle en la explosión

No son de todo culpables, eso claro y cierto es

Pero ellos sí movieron las piezas de este ajedrez

Normaron mucho, crearon mil y un arreglos para sí

Pero no los respetaron ni los supieron cumplir

Hoy por hoy se ha estancado a la mitad, sin solución

El conflicto que crearon cuando se extendieron sin razón

Y es un círculo vicioso que jamás se ha de eliminar

Salvo que alguien decida comenzarlo a destrozar. 

¡Atención!

Señoras y Señores:

Ponedse de pie y dadle la bienvenida a nuestra señora, la vida

Viene vestida de un blanco profundo y sus ojos verdes nos miran seguros

Su vestimenta es extraña y muy singular

Tiene un poco de picardía, amor y paz

¡Cómo contagia la sonrisa de esta señora!

Es única, elegante, inteligente, hermosa

Tiene a esta altura millones de años

Y sigue tan bella como fuera de antaño

Saludadla y bendecidla

Acogedla y sentidla

Damas y caballeros

Nuestra señora, la vida.

El Vampiro

El Vampiro

Los colmillos ansiosos de carne fresca,

Los ojos vivos, buscando la presa

La sed, el hambre, tormenta,

Lluvia, dolor, pérdida.

La joven, lógicamente sola

La gente, como siempre, indiferente

El famoso callejón

Oscuro y a lo lejos el ruido del tacón

El sonido agudo del miedo

Y yo despacio, sin freno

La joven apresura el paso

La sigo lentamente, tranquilo y calmo

Ah, la famosa calle sin salida,

El grito, la pena, la ironía

La joven me ve, me ofrece dinero

Le digo que eso, no es lo que quiero

La joven echa a correr,

Yo la tomo del brazo, le quito el poder

Siento el sonido de su corazón

Fuerte late como el mío ya no

“Calma, no te dolerá”

Cuando digo esto, ella se pone a llorar

El hambre, la sed, la maldad

La sangre, el cuello, mi realidad.

La luz

Miedo, angustia, frustración, espanto

Terror, impotencia, sudor frío rebaso

Tiembla, mece, bota, pega

Siento que me empuja a su manera

¡No! ¡No quiero!, no quiero salir

Quiero quedarme aquí

He vivido tantas buenas cosas que no quiero morir

Pues nadie sabe lo que hay allí

Déjenme tranquilo, ¿por qué siguen?

ahí va de nuevo, otro golpe, otro empujón

Ya no puedo más, estoy saliendo a ese lugar

De dónde nadie vuelve jamás

Me acerco, veo un túnel negro, y al final, una luz

Ya me lo habían dicho no debo seguir la luz

¡No!, ¡no la luz! ¡No!, si llego a la luz muero

Pero no puedo evitarlo, no puedo ir en contra de la corriente

Salgo, salgo a la luz

Abro los ojos y gritan:

“es un varón”

tiempo

¿Qué es el pasado más que el recuerdo del presente?

Una hoja malograda con una tinta inexistente

Una vaga sensación de que algo existió

Mientras un sueño nacía otro se murió

¿Qué es el futuro más que un presente que se viene?

Una serie de elecciones que se dan o se detienen

Un sentimiento ajeno de un porvenir más lejano

Una preocupación pensando en todo de antemano

¿Qué es el presente más que un tiempo de sucinta existencia?

 Pues nos llega y se nos va sin colmarnos la paciencia

Desaparece cuando es y no es hasta que fue

Se convierte en una efímera presencia del ayer

Y tantas horas que pasamos, reflexionando sobre el tiempo

Cuando ninguno de estos existe, cuando son tan sólo un sueño

Y lloramos del ayer mientras sufrimos por el mañana

Y del hoy sólo sabemos que de a poco se acaba

Y seguimos confinándonos en aquella enfermiza lucha

De intentar controlar lo que viene, se dice o se escucha

Qué increíble paradoja el tiempo en sí sólo aprisiona

Pues quien antes fue futuro y presente, pasado es ahora.

No pretendo

No pretendo mostrarme como un ser afable

Ni tampoco ser alguien inescrutable

No tengo intenciones de ser lo que quieres

Y tampoco razones para ser lo que eres.

No creo que entiendas si digo no es ego,

Vanidad, ni soberbia, tampoco es un juego

Esto es simplemente un escrito cualquiera

Aunque con ello no digo “de lectura ligera”.

No conocerás cómo soy en tres líneas

Tampoco con ellas sabrás hoy mis dichas

Mis penas y glorias son mi pasado

Mi futuro y presente están acá al lado.

El tiempo tan solo ofrecerá la sapiencia,

De comprender a los otros pues es una ciencia

Te diré tan sólo en qué soy diferente

Tiendo a ser sincero con toda la gente.

El hombre y la Luna

La luna va brillando en el mar que de frente ruge

Y como una estrella muerta él se ve que también sufre

Las aguas van subiendo cual leche en hervor

Y le van acariciando los pies desde el talón

Él se queda ahí tranquilo, no se desea mover

Mientras el azul de luna en su piel se puede ver

De pronto y en un momento en su cara apareció

Una lágrima candente, un diamante de dolor.

La marea sigue subiendo, en sus pies ahora está

Pareciera no importarle que le moje más y más

Otra lágrima resbala de la mejilla hasta el mentón

Siente que arde como lava aunque no cause abrasión

No existen energías ni en sus manos ni en sus pies

Para salir de esa inercia en que ha caído esta vez

Cada cierto tiempo, un quejumbroso movimiento se le ve

Y con convulsionantes quejidos, inmóvil queda él.

De pronto un movimiento, es el viento, fuerte va

Le quita el sombrero y lo manda a volar

El hombre lo observa y comienza a recordar

Se levanta y lo busca con vehemente ansiedad

Cuando cae frente al agua sin dudar se lanza a él

Y rescata con sus manos aquel género café

Para él no es un sombrero, y ciertamente su valor

No es el que se compra en una tienda de estación.

Las lágrimas le brotan y éstas salan ahora el mar

Y él ahí se acomoda como un feto a llorar

Mientras la olas le bañan y le empiezan a envolver

En su tristeza él siente que ya no hay nada más que hacer

Se deja ir con la corriente, mar adentro hasta el final

Y descubre que en un momento no tendrá más que llorar 

Mientras él llora en silencio, el sombrero que salvó

Se queda firme en tierra como prueba que existió.  

Rabia

Veo un círculo gigante que me rodea completamente

No es un círculo entero, se encuentra segmentado

Lo conforma un polvo negro separado sutilmente

Y desprende un aroma que jamás he recordado

Tengo una intuición interna para intentar salir

Observo de forma detenida, pero no sé a dónde ir

Me siento en el centro, total ¿qué mal me puede hacer?

Pero la misma fragancia del polvo en mis manos creo oler

Intento recordar dónde antes sentí aquel olor

Y mi mente se me nubla, creando conmoción

Pienso en miles de momentos, recuerdos en fragor

Y repentinamente observo, todo en mi dirección

De pronto oigo voces, que me gritan otra vez

Y recuerdo, nombre a nombre, lo que quieren defender

Y yo, mientras callo, siento mi piel encender

Y recuerdo, en ese momento, para qué era el polvo aquel.

Pues de mi piel al rojo todo se comienza a prender

No me gusta, no lo quiero, pero deben entender

Que la pólvora va cumpliendo su papel de silenciar

Pues les falta, ciertamente, descubrir cuando callar.

El jinete del Este

Galopando en su caballo por las tierras negras

Busca una orilla donde descansar,

Va a la ribera del río más cercano y amarra su caballo a un viejo árbol,

Toma agua del río y la pone a calentar,

Para comer, saca su pan

Prende fuego, la tarde era helada,

Busca leños para mantener su fogata

                                                                         

La noche cae y con ella las luces de las estrellas llenan el valle,

Sólo con su caballo el hombre, come sin penares

A lo lejos escucha el aullar de lobos,

Se impacienta, era su primera noche solo

Los ruidos del agua incluso le sonaban lúgubres,

El cantar de los Tue- Tue sonaba en todo ese cruce

De pronto el fuego se apagó, los sonidos de la noche aumentaron considerablemente

La bulla del silencio hizo pasar a nuestro personaje millones de cuentos

Desde un asesino de pies a cabeza, hasta un tuerto

Con miedo tendió su tienda, rápido y a tientas

Durante la noche soñó mil maldades

Desde vacas voladoras hasta gatos ladrantes

Los asesinos estaban a la borda del día

Y los buenos eran más raros que mosca en invierno

Exaltado despertó, miró su reloj, recién eran las dos,

Se calló para oír su corazón, debieron haber escuchado como sonaba ese motor

Otro ruido irrumpió en la noche, una bala, si eso era una bala

Se abrazó a su almohada y quiso dormir, nada, nada

Cuando creía que su miedo no podía ser superado

El alma se le puso en un hilo con el relinchar de un caballo

Miró su reloj, eran las dos

Del río millones de seres parecían emerger

Desde horripilantes monstruos hasta ciempiés

La tierra temblaba y el aire sonaba al ser cortado por la delgada carpa

Y de repente otro sonido, otro disparo al aire lanzado

Ya no podía más del horror, miró su reloj, seguían siendo las dos

De un momento a otro todo se aclaró, del este salió el sol,

Los jilgueros comenzaron a cantar y todo volvió a su cauce natural,

Todo fue un sueño, pensó

Miro su reloj…

… Aún eran las dos.

intentos fallidos

Me propuse crear un poema de amor

Un poema que haga llorar de emoción

Me quedé varado en plena composición

Pues no concebía el poema de amor

Me propuse con versos emular

La belleza perfecta de la sociedad

Mas quedé estancado en la realidad

Entonces no pude nada emular

Intenté luego en prosa escribir

Los deseos ingenuos de un arlequín

Mas tampoco así lo pude esgrimir

Quizá el momento no era para mí

Entonces decidí mi angustia plasmar

Escribir mi enojo y ponerme a rabiar

Y también descubrí que no lo pude hacer

Y entonces la cosa ya fue de temer

Y finalmente cuando no podía más

Me puse a escribir, por escribir no más

Y entonces, de la nada, este poema salió

Así son las cosas en la composición